Sin importar el riesgo máximo declarado por las autoridades en la CDMX, la gente aprovechó el fin de semana para salir a la calle o, incluso, trasladarse a la playa.
Aunque el sábado entró en vigor el semáforo en rojo por Covid-19 en la Zona Metropolitana del Valle de México y las autoridades exhortaron a quedarse en casa, los capitalinos salieron a hacer compras, pasearon por el Centro Histórico e, incluso, algunos aprovecharon para viajar a las playas de Acapulco.
A pesar de que los comercios no esenciales cesaron su actividad y que varias de las calles fueron cerradas a la circulación, cientos de capitalinos abarrotaron las calles del Centro. El sábado, principalmente, las calles lucieron llenas y los paseantes ignoraron las medidas recomendadas.
El domingo, segundo día del semáforo rojo, los tianguis en las cercanías de Tepito, recibieron a cientos de clientes; familias enteras de compras por la temporada navideña.
Los locatarios instalaron módulos para aplicar gel antibacterial y ofrecieron cubrebocas a quienes no lo llevaban, pero la sana distancia se omitió en algunos casos.
Incluso, las playas del puerto de Acapulco, destino muy popular para los capitalinos en estas fechas, lucieron llenas a pesar del llamado a quedarse en casa.
Muchos de los turistas que pasearon por las playas este fin de semana no utilizaban cubrebocas ni respetaban la sana distancia, medidas fundamentales para evitar contagios.
El domingo, la Secretaría de Salud reportó un acumulado de un millón 320 mil 545 personas contagiadas y un total ya de 118 mil 202 decesos por la pandemia.
La Capital se mantendrá en semáforo en rojo hasta el 10 de enero. En el país, se encuentran tres estados en semáforo rojo y 24 en naranja, lo que implica riesgo máximo y riesgo alto, respectivamente