Nos pasa muchas veces. Metemos las sábanas en la lavadora y cuando las sacamos están con las misma manchas que antaño. Además con el tiempo hay cierto desgaste, por esto siempre es mejor hacerlo con una temperatura más baja y comprar calidad. Tenemos un truco para limpiar las sábanas para que queden del todo blancas.
Las sábanas deben lavarse una vez cada una o dos semanas. Pues se quedan con el sudor de nuestra piel, con olores y también bacterias que se acumulan en el colchón.
La manera de limpiar las sábanas para que queden del todo blancas
Hay varias maneras de hacerlo incluso sin tener que usar lejía, porque, con el tiempo, pueden acabar amarilleando todo tipo de color y tejido. Eso sí, lo importante es quitar las manchas antes y no meterlas sin más en la lavadora.
Las de algodón soportan temperaturas superiores pero las manchas deben tratarse antes. Además algo que a veces no hacemos es seguir las indicaciones de las etiquetas, allí se establece si son más o menos delicadas.
Otro truco es secar las sábanas de algodón a calor bajo porque así suelen durar mucho más en el tiempo.
Las sábanas de lino son más delicadas que las de algodón. Por esto es mejor usar un poco de vinagre blanco junto al suavizante de la lavadora y secarlas a baja temperatura.
Aunque los expertos recomiendan lavar las sábanas a altas temperaturas, más que nada para acabar con las bacterias y los ácaros que se acumulan, también hay quien las lava con agua fría. También puede hacerse pero quizás no tendrá los mismos resultados.
Como hemos especificado, el secado es también importante y se recomienda poder secarlas al sol para que se vaya el amarillo que a veces se queda en las sábanas. Esto es posible en verano y primavera, si bien hay días donde es menos factible hacerlo.
Truquillos para lavar mejor las sábanas
Desde Creaciones Euromoda dan estos consejos para que las sábanas estén más blancas.
- Bicarbonato de sodio. Añadir media taza a la medida del detergente que usas en tu lavado regular.
- Vinagre blanco destilado (media a una taza), lo agregas a tu cantidad de detergente regular.
- Suma media taza de peróxido de hidrógeno (el de 3% que se encuentra fácilmente disponible en tiendas y farmacias) al detergente en tu lavado regular.
- Zumo de limón: añadir cuarta o media taza al detergente que habitualmente usas.
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