El seleccionador español femenino de baloncesto, Miguel Méndez, se mostró “contento con el trabajo de las jugadoras” en la victoria ante Hungría (77-66), que le ha dado a España la clasificación matemática para el Europeo 2023 de Eslovenia e Israel con dos jornadas de antelación, y afirmó que jugaron “como equipo”, aunque también admitió que les faltó ser “más estables”.
“Estoy contento, aunque nos hubiese gustado ser más estables jugando y haber perdido menos balones, pero asumimos el riesgo que corríamos y estamos contentos con el trabajo de las jugadoras”, manifestó en rueda de prensa Méndez tras el encuentro disputado en el Palacio de Deportes Carolina Marín de Huelva.
Méndez manifestó que esta semana tenían dos partidos en esta ciudad andaluza y estaban “dispuestos a ganar los dos”, y destacó que, tras lograr las dos victorias ante Islandia y Hungría, han logrado el objetivo que se marcaron el pasado verano: estar en el Europeo, después de que las islandesas hayan ganado en esta jornada a Rumanía.
“Durante muchos momentos hemos jugado como equipo”, subrayó el técnico, que resaltó que España sumó ante Hungría 24 asistencias, pero también falló “tiros abiertos y bandejas, algo que no pasa normalmente”.
“En mis equipos me gusta que se note la palabra equipo”, añadió, y aunque hay jugadoras de referencia, siempre le “gusta” que se juegue de forma colectiva, tras lo que insistió en su deseo de que “con el paso del tiempo las jugadoras jóvenes se acostumbren a jugar juntas”.
El seleccionador español femenino señaló que en el quinteto inicial había jugadoras como Maite Cazorla, Queralt Casas, Raquel Carrera y María Conde, que no habían jugado juntas en la selección y que por ello necesitan “tiempo para que aparezcan las sinergias”, y dijo que no tienen “prisa”, aunque le “gustaría que fuera cuanto antes”.
Una de esas jugadoras, la pívot Astou Ndour, elegida mejor jugadora del partido contra Hungría con 28 créditos de valoración (21 puntos y 6 rebotes), destacó que sabían que este encuentro iba a ser “difícil”, pero se mostró satisfecha por haber cumplido el “objetivo”.
“Sabíamos a lo que íbamos”, aseguró Ndour, que resaltó que las jugadoras españolas estuvieron “muy centradas en el partido” y que no tiraron “la toalla en ningún momento”, además de valorar que supieron “empujar” con constancia en defensa y en ataque para ganar el partido.