México, entre los países con mayor "puntuación criminal" del mundo: Iniciativa Global

México, entre los países con mayor “puntuación criminal” del mundo: Iniciativa Global

De acuerdo con el Índice Global de Crimen Organizado de la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado, México tiene una puntuación criminal de 7.56, lo que lo coloca en el cuarto lugar en la lista de los 193 países analizados.

La Iniciativa Global es un organización independiente de la sociedad civil, ubicada en Suiza. Pero el índice surgió en Nueva York, Estados Unidos, a raíz de una serie de discusiones extraoficiales de alto nivel entre funcionarios encargados de hacer cumplir la ley de países desarrollados y en desarrollo. El objetivo de la organización es contar con una plataforma para promover un mayor debate y enfoques innovadores para una estrategia global inclusiva contra la delincuencia organizada. Los resultados se basan en un conjunto de datos proporcionados por expertos de todo el mundo, que observan distintas áreas que impactan a las sociedades.

De esta forma, el informe sostiene que México “es un país de tránsito para la trata de personas, principalmente para víctimas centroamericanas que se dirigen al norte”. Sin embargo, informa que las regulaciones fronterizas por Covid-19 obstaculizaron las operaciones de trata a través de la frontera norte, lo que resultó en menos víctimas pero a un valor más elevado.

Foto: Iniciativa Global contra el Crimen Organizado

“La pandemia exacerbó la colusión entre funcionarios corruptos y traficantes que se aprovechan de los migrantes mediante la participación forzada en economías criminales o la extorsión, con funcionarios que se valen más de los vínculos con el crimen organizado que del soborno para obtener ganancias”, declara la iniciativa.

Los traficantes de personas del sur de México suelen ser miembros de la comunidad local, que transportan personas en automóviles, autobuses o remolques; mientras que los del noreste de México, a menudo, forman parte de grupos organizados más grandes que controlan redes de tráfico.

México, continúa el reporte, tiene un mercado de tráfico de armas bien consolidado. “Existe una gran demanda de armas de fuego de Estados Unidos y América Central por parte de los grupos criminales, y la población civil y mecanismos bien establecidos facilitan el acceso a las mismas”.

Foto: Cuartoscuro

En el documento se señala que, a pesar de que en México no es posible adquirir armas de fuego legalmente, ciudadanos y cárteles de la droga compran armas de fuego estadounidenses y las pasan de contrabando a través de la frontera.

Por otro lado, denuncia que los delitos contra la flora y la fauna son importantes en México y los traficantes suelen estar activos en otros mercados criminales. Por ejemplo, los traficantes de drogas controlan el tráfico de madera en Jalisco y obligan a las comunidades locales a pagar cuotas para su protección; mientras quienes protestan suelen ser víctimas de secuestro o desaparición.

Respecto al tráfico de fauna, el reporte denuncia que es facilitado por autoridades corruptas, ya que el tráfico de jaguares, águilas reales, loros, guacamayos y reptiles genera grandes ganancias.

Además, la Iniciativa afirma que el robo de petróleo en México, la minería ilegal de oro y plata son otros retos que enfrenta el país.

La venta de drogas sigue siendo un problema, ya que el aumento de la demanda por parte de los consumidores de drogas estadounidenses, que pasaron del consumo de analgésicos recetados a la heroína callejera debido a la epidemia de opioides, provocó un aumento de la producción en México.

También, señala que las organizaciones de tráfico de drogas de México se encuentran entre los grupos de tipo mafioso más sofisticados del mundo. “Aunque en la actualidad hay menos grupos con grandes operaciones internacionales debido a la fragmentación de los cárteles, los grupos que quedan tienen redes que abarcan la mayor parte de las Américas, e incluso llegan a Europa y Asia”.

Foto: Cuartoscuro

“Si bien los cárteles integrados en el Estado no controlan los mercados criminales, la corrupción dentro del gobierno y los cuerpos de seguridad favorece a las redes criminales e influye en las actividades ilícitas, proporcionando ingresos a los funcionarios públicos de alto rango”.

En el informe se resalta que el gobierno carece de una estrategia de seguridad coherente, y que los intentos de abordar la corrupción y el crimen organizado se consideran “altamente politizados o bien esfuerzos para avergonzar a gobiernos anteriores”.

Por último, señala que las leyes relativas al crimen organizado “no se cumplen correctamente y se ven truncadas por la corrupción“.


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