Colectivos acusan a la Fiscalía de Morelos de haber incurrido en desaparición forzada en al menos dos oportunidades, por el mal manejo de los 84 cadáveres hallados en Jojutla en 2015.
Estrella Pedroza
Colectivos de Morelos y familiares de personas desaparecidas solicitaron a la ONU emitir un llamado urgente al Estado mexicano para que la Fiscalía General del Estado de Morelos (FGEM) transparente la información relacionada con una fosa común irregular en Jojutla, pues hasta ahora solo ha sido identificado uno de los 84 cadáveres recuperados.
En 2015, familiares de personas desaparecidas denunciaron la existencia de una fosa irregular en la Colonia Pedro Amaro, en ese municipio; entre abril y mayo de 2017, se realizaron las exhumaciones.
Integrantes del colectivo Búsqueda de Familiares Regresando a Casa Morelos e IDHEAS, Litigio Estratégico en Derechos Humanos, establecieron comunicación con el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la ONU.
En el documento, destacan que la fiscalía de Morelos ha incurrido en desaparición forzada en al menos dos oportunidades: la primera, al disponer de los cuerpos hallados en la fosa común irregular de Jojutla y, la segunda, al inhumarlos nuevamente en el Panteón Jardín de los Recuerdos en lugar de preservarlos en frigoríficos, para mantener la cadena de custodia de la evidencia forense.
Además, hasta el momento, no hay avance en las investigaciones e identificación de las personas.
En la primera fase de exhumaciones, fueron recuperados 85 cuerpos, entre ellos cadáveres con ropa, restos de menores de edad o de mujeres con signos de tortura. A la fecha sólo uno ha sido identificado.
El llamado urgente tiene por objeto que el Grupo de Trabajo de la ONU exija que la FGEM demuestre las acciones llevadas a cabo para la identificación de los cuerpos en calidad de desconocidos en Morelos (más de 200 hallados en las fosas comunes irregulares de Jojutla y Tetelcingo, y casi 500 cuerpos no identificados que se encuentran en los servicios forenses); que solicite a la fiscalía estatal un plan de exhumaciones para identificar cuántas fosas comunes irregulares existen, dónde están y cuál ha sido la participación de las autoridades en su funcionamiento, y que exhorte a autoridades estatales y federales a la construcción prioritaria de un Centro de Identificación Humana, dotado de herramientas tecnológicas para llevar a cabo los peritajes científicos necesarios.
Todo esto con la participación de familiares y colectivos de familias desaparecidas.
Angélica Monroy, integrante del colectivo Búsqueda de Familiares Regresando a Casa Morelos, al dar lectura a un comunicado de prensa destacó que las familias piden ante el Grupo de Trabajo de la ONU la celeridad necesaria para dar sepultura a sus familiares y ayudar a otras familias a encontrar a los suyos.
“Nuestro duelo hoy se encuentra incompleto al estar en la incertidumbre de no saber si nuestros seres queridos se encuentran entre los hallazgos de la fosa de Jojutla”, expresó.