El Draft de la NBA está a la vuelta de la esquina y con poco más de dos semanas hasta la fecha, los equipos ya trabajan en un plan de acción para la noche del evento. Uno de los nombres propios de este año es el de James Wiseman, quizás la mayor promesa de su generación
El problema con Wiseman, que bien podría salir elegido con el primer pick de la noche, es que él no quiere jugar en Minnesota, la franquicia que precisamente tiene la primera elección del Draft. Los Timberwolves ganaron la lotería por delante de Warriors y Hornets, que elegirán segundos y terceros, respectivamente.
Según las últimas informaciones de Brian Windhorst, de ESPN, Wiseman no quiere saber nada de los Timberwolves, principalmente porque considera que la presencia de Karl-Anthony Towns en el equipo le perjudica de cara a conseguir minutos y lograr desarrollar su juego.
Por otro lado, en las últimas semanas se ha barajado la posibilidad de que los Wolves traspasen su elección del Draft y busquen hacerse con un jugador consolidado en la liga y que les permita dar el salto de calidad que buscan desde hace años.
Ahora mismo la plantilla de Minnesota tiene talento y falta de experiencia a partes iguales. Jugadores como Towns y D’Angelo Russell pueden dar un alto rendimiento pero a la hora de la verdad es necesaria una estrella que conozca la liga y lo que es jugar playoffs.
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